Salesianos Cooperadores
Los Salesianos Cooperadores nacen con el proyecto de Don Bosco en favor de los jóvenes pobres. Desde fines de 1841, en efecto, para poder atender su oratorio, Don Bosco recurrió a la colaboración de muchas personas. Ampliando su obra, Don Bosco se dio cuenta de la creciente necesidad de Cooperadores, (también de sacerdotes, pero sobre todo de laicos), ligados a la misión salesiana. Pensó entonces en unirlos y asociarlos como un grupo más de la que se estaba constituyendo como Familia Salesiana.
Se trata pues de una vocación para laicos dentro de la Familia Salesiana, para la cual se redactó en 1986 el actual Reglamento de Vida Apostólica, promulgado por el Rector Mayor y aprobado por la Santa Sede; en éste se traza la identidad personal y asociativa de los Cooperadores Salesianos.
Objetivos
Compartir encuentros formativos y de oración, retiros, celebraciones, fiestas… en el grupo y con otros miembros de la Familia Salesiana
Implicarse en la acción apostólica en las parroquias y acompañar y ayudar en las necesidades del entorno y proyectos del colegio, en especial a favor de los niños y jóvenes más necesitados